No podemos dejar de mencionar los numerosos cafés de la avenida Corrientes, ya que ellos también son y han sido parte de la historia de Buenos Aires. Los primeros abrieron hacia 1760, pero su mayor gloria la alcanzaron durante este siglo XX. Pese a que importantes políticos, escritores, periodistas, músicos y actores vistieron sus mesas; muchos de estos locales ya no están, y los que aún perduran, ya no son lo que eran antes...
Por Corrientes, desde la avenida Callao y hasta la calle San Martín abundaron los cafés con sabor a tango, a política y disquisiciones psicologistas, a conquistas y engaños, y a todo tipo de movidas artísticas. La bohemia porteña se dio cita a lo largo y a lo ancho de esta avenida, pletórica de ilusiones y anhelos. En los distintos cafetines se pronunciaron panegíricos manifiestos acerca de la libertad y los intelectuales de la época evocaron con gran lirismo la autenticidad del alma artística, alejada de los hábitos burgueses y de la mediocridad.